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La Roja debe mejorar
Mar 22 Jun - 23:00 por BOIXOS NOIS
Honduras no era oponente, desde el primer segundo dominamos el partido; sin problemas para tener la posesión y sin ninguna dificultad para tocar y no perder. Una vez más el adversario iba de farol en la previa, por más que Reinaldo Rueda amenazase con quitar la pelota a los nuestros, el partido era un monólogo de la Roja con los hondureños por detrás de la línea del balón de manera permanente.
Las ocasiones fueron cayendo como fruta madura, quedaba saber si eran por mérito o como consecuencia de la dificultad de los de Reinaldo Rueda para defender la amplitud del campo con la línea de cuatro. Un gol en una acción individual y finalizaciones tras acciones combinativas simples que está por ver que sean válidas contra rivales de más jerarquía.
El ritmo de balón era lento, los pases se repetían y los defectos se acumulaban. En el primer partido, Xabi y Busquets hacían lo mismo; contra Honduras se liaron todavía más y es que Xabi Alonso fue un invasor del espacio de un Busquets que juega para defender. Digo lo de invasor porque Xabi estaba en el costado izquierdo de Busquets en defensa pero en ataque hacía la diagonal para ir al desmarque de apoyo cuando Ramos tenía el balón. No se repartían el espacio y el escalonamiento provocaba que Xavi Hernández se quedase oscurecido por más que Wilson Palacios fuese intenso en la marca.
La posición de Villa era decisiva en lo colectivo pero una pérdida individual. Pegado a la línea, cada vez que tenían el balón los jugones, Villa no era línea de pase y así fue hasta el final porque sólo había ojos para un Torres que necesita encontrar el ritmo ya que nuestra suerte estará en meter las pocas que se tienen en los partidos de verdad. Era mejor Villa por dentro, hubiésemos mejorado la finalización pero eso significaba romper la pareja de intocables.
Mata por fuera hubiese mejorado la interpretación posicional de Villa, también Pedro hubiese sido una opción. Sin problemas para tener el balón se encontró a faltar más jugadores para ofrecer profundidad y verticalidad de cara a gol y menos que la quisieran tocar por dentro ya que para batir líneas no hacía falta demasiado. Las sensaciones no son buenas, el partido fue perfecto para coger ritmo y aumentar la autoestima. Nada mejor tras derrota que un partido plácido y una goleada para creer.
Estamos lejos, debemos mejorar. No es mal plan ir de menos a más pero el libreto de la Eurocopa ya es historia. El doble pivote es intocable, Cesc no tiene sitio y la pareja Villa – Torres obliga al guaje a jugar en banda y eso indica que contra rivales competitivos, el ‘7’ tendrá que hacer cuarenta metros para defender y ayudar a Capdevila en defensa, y cerrar la línea ante subida del lateral izquierdo del adversario. No es natural, vamos forzados. Las piezas no encajan y así sólo nos podemos agarrar a que si somos primeros tendremos un buen calendario hasta las semifinales. Empezamos mal y acabamos como si fuera una pachanga. En lo físico dejamos muy malas sensaciones, la fe nos lleva a pensar que fue la altitud, la razón nos indica que nos falta chispa. ¡Vamos España!